LA PRÁCTICA FINAL SUPERVISADA DE LA TECNICATURA UNIVERSITARIA EN ACOMPAÑAMIENTO TERAPÉUTICO PERMITE A LOS ESTUDIANTES EJERCITAR EL ROL PRE-PROFESIONAL DE ACOMPAÑANTE TERAPÉUTICO (AT), EN CONDICIONES DE SUPERVISIÓN Y ENMARCADOS EN UNA EXPERIENCIA DE INSERCIÓN PRÁCTICA; FACILITANDO EL DESARROLLO Y ADQUISICIÓN DE COMPETENCIAS TEÓRICO-PRÁCTICAS Y HERRAMIENTAS ESPECÍFICAS; LA INSERCIÓN EN PROBLEMÁTICAS Y CONTEXTOS REALES Y DIVERSOS; Y EL COMPROMISO COMUNITARIO.

La currícula teórico-práctica del estudiante aspirante al título de Técnico Universitario en Acompañamiento Terapéutico tendrá como instancia final, la realización de una Práctica Final Supervisada (PFS), conjuntamente con la elaboración, presentación y defensa de un Trabajo Integrador Final (TIF).

Para esta instancia, deberá cumplir una carga horaria mínima de 500 horas de Práctica; distribuidas en 300 horas de Práctica Profesional Supervisada y 200 horas dedicadas a la elaboración del Trabajo Integrador Final (TIF).

  • Fortalecer la formación teórica-práctica de los estudiantes, a partir de la experiencia supervisada dentro de una inserción práctica a un espacio de la realidad profesional e institucional.
  • Estimular la construcción de una posición fundamentada teóricamente, respecto al quehacer profesional.
  • Generar espacios de reflexión y aplicación crítica de los conocimientos teóricos adquiridos en la formación.
  • Promover en el futuro profesional el aprendizaje de competencias teórico- prácticas, el espíritu crítico, y el compromiso con la comunidad.
  • Fomentar el aprendizaje del rol profesional, en condiciones de supervisión y dentro del marco ético-deontológico.